Uno de los sentimientos más cool que puedes lograr con video juegos es la maestría.
Una vez, me acuerdo que estaba en casa de un amigo jugando Guitar Hero 3, por allá por el año 2009. Este man tenía cuatro guitarras, una batería y hasta un piano para jugar Rock Band. Su cuarto parecía un garaje lleno de instrumentos de plástico, como de una banda de mentira en un show de TV para niños. El tipo namás hablaba, leía y soñaba con jugar estos títulos.
El día aquel estaba en la casa del susodicho junto a otros amigos y esa fue la primera vez que vi a alguien tocar Through The Fire And Flames de DragonForce en modo experto de comienzo a fin. Todos quedamos boquiabiertos viendo la velocidad con que los brazos y dedos de mi pana desaparecían, a veces contorsionándose en poses que lucían dolorosas.
Puedes hacer lo mismo con deportes o el gimnasio, pero hay algo sobre demostrar alta destreza en un juego, cualquier juego, que es poético. En el caso de Guitar Hero, mi amigo pertenece al grupo de mil humanos en el planeta que han alcanzado ese nivel y es algo que solo puede demostrar si tiene una televisión, la consola, el juego, los controles, el DLC instalado–bueno, tú me entiendes.
La vaina es que cuando nos demuestra su nivel, es una sensación increíble de orgullo tanto para él como para los espectadores.
Para mí, el juego que lograba esa sensación era Contra: Shattered Soldier, un título polarizante que muchos consideran una oveja negra por todos los cambios que ingresó en la franquicia, mientras que otros como yo lo aplaudimos precisamente por esos cambios.
Contra es de las primeras franquicias grandes de video juegos que surgieron en la década de los 80’s junto a Mega Man y Double Dragon. En él tomabas el rol de un soldado azul o rojo (para el 2do jugador) que debía atravesar bases militares, junglas y vientres alienígenas repeliendo una invasión extraterrestre.
La franquicia tuvo una buena recepción durante la era del NES, pero su auge real llegaría con Contra III: The Alien Wars para Super Nintendo. Este título tomó todo lo que había hecho famosa a la serie y lo llevó a otro nivel. De pronto tenías mejores gráficos y sonido, más armas divertidas, y enemigos más grandes y grotescos.
Uno de los niveles más memorables comienza con una persecución en moto a alta velocidad por un desierto donde luego un helicóptero te “recoge”, dejándote guindar de uno de sus misiles, para luego disparar dicho proyectil (contigo agarrado todavía) hasta explotar y abrir una grieta en el cuartel principal del enemigo. No había otra forma.
Contra III es considerado el más popular porque es el más balanceado, con una mezcla de niveles divertidos que pueden ser difíciles, pero no imposibles de aprender.
En contraste, los que tenían SEGA Genesis (o Mega Drive en Europa), se dieron de frente con Contra: Hard Corps, un tour de force berraco donde habían personajes nuevos—disque un robot llamado Brownie—cada uno con armas y habilidades únicas, en un futuro super jodido, incluso bajo los estándares de la franquicia.
Hard Corps es Intenso con “i” mayúscula. En vez de niveles con una mezcla de plataformas y secciones con enemigos variados, el primer Contra para una consola de SEGA es prácticamente un Boss Rush donde cada nivel te avienta al menos 3 enemigos grandes, uno tras otro, antes de llegar al enemigo final.
Es considerado uno de los juegos más difíciles en toda la serie y también el que más lejos había llegado intentado tacharle una trama a la acción.
Hasta aquí llegaron los buenos tiempos.
El Oscurantismo
El salto de 2D a 3D fue una prueba de supervivencia para muchos estudios. En el camino se nos quedaron bastantes personajes que intentaron pegarla en PS1 y SEGA Saturn, pero no llegaron muy lejos. Mortal Kombat, Earthworm Jim, Bubsy y Prince of Persia fueron de los más memorables que tocaron fondo en el intento.
Contra fue de las series que más sufrió y todo se debió a que Konami puso a un estudio externo, Appaloosa Interactive, a cargo de hacer el traspaso a gráficos 3D.

En dos años y la misma cantidad de juegos, el estudio húngaro se echó la serie al caño, dándonos títulos con gráficos cuestionables y una dificultad injusta a la vez que trataban de reinventar la rueda con nuevas ideas de gameplay y niveles.
En resumidas cuentas, la apuesta no funcionó y Contra como la conocíamos no volvería a las consolas hasta la siguiente generación, donde cuatro años más tarde se formó la demencia en el PlayStation 2.
Se Forma la Demencia en el PlayStation 2
Konami quería traer de vuelta su serie tan preciada, pero sabían que no podían regresar con el rabo entre las patas. El próximo Contra tenía que ser hecho en casa y con todos los hierros.
Fue así como armaron una nueva banda que mezclaba lo clásico con lo nuevo.
El juego fue desarrollado por Team Kijirushi, uno de los equipos internos en Konami Tokyo. Nobuya Nakazato, el director de Contra III y Hard Corps, regresó a dirigir y gestionar el diseño y trama del juego. Konami tenía pensado sacar un Contra en Nintendo 64, pero abortaron la misión a favor de darle más recursos a Nakazato-san.

La cereza en el cake fue la música. Sacaron a la leyenda Akira Yamaoka, que llevaba años creando atmósferas tétricas para los juegos de Silent Hill, para que hiciera algo distinto. Junto a Sota Fujimori, ambos se fueron al extremo del rock pesado con una banda sonora que combinaba partes iguales de shred metal, música industrial y techno. La vaina iba en serio.
En Japón, el nuevo título salió a la venta en el 2002 y fue bautizado con el nombre de “Shin Contra” (真魂斗羅). Literalmente traducido como “El Nuevo Contra”, pero en América lo conocemos como Contra: Shattered Soldier.
Shattered Soldier trajo de vuelta el gameplay en dos dimensiones, aunque todos los gráficos eran poligonales. En vez de power ups y armas flotantes, el jugador arranca de salida con las tres armas que usará en toda la aventura. Cada arma tiene un modo alterno que demora en cargar, pero lleva más fuerza al disparar.
Los niveles también eran más parecidos a Hard Corps que Contra III, con pequeños momentos de plataformas apretados entre mini bosses, muchos de los que en cualquier otro juego serían considerados como enemigos finales. Momentos icónicos de la franquicia, como las persecuciones en moto o los viajes en misil mágico, volvieron pero ajustados a la intensidad de la presentación.
Esto hacía del nuevo Contra un juego rápido donde la precisión y sabia elección de armas separaba a los novicios de los pros.
Cada nivel cuenta con ciertos enemigos “especiales”. Al matarlos, estos elevan tu porcentaje de “Hit Rate“, el cual determina tu puntuación al final del nivel junto con la cantidad de vidas y continues que hayas perdido.
Pero no todo es tan intenso como parece. Por suerte, el juego es linear y repetitivo al punto que los enemigos se comportan de la misma forma en todas las partidas. Aquellos jugadores con una buena capacidad de observación y memoria serán capaces de descifrar patrones de movimiento en el enemigo y así avanzar más rápido por los niveles.
También ayuda que los primeros cuatro niveles pueden jugarse en cualquier orden, dándonos una oportunidad de intentar algo nuevo cuando la frustración nos gana.
Lo mejor para mí era jugar con mis hermanos, porque teníamos que comunicarnos para sobrevivir, y en este proceso es que aparecían los chistes y frases célebres.
“OK, ahora tienes que saltar cuando veas el laser moverse” o “Para este enemigo usa solo el lanzallamas”. Lo mejor era ver cómo todos nos íbamos adiestrando hasta llegar vivos a los bosses finales de cada nivel.
Algo que no se le aplaude lo suficiente a Contra: Shattered Soldier es que fue uno de los primeros juegos de su género en emplear elementos del Roguelite en su progresión.
Muchos jugadores primerizos, incluido un servidor, quedaron awebaos tras la revelación de que el juego no salva tu progreso hasta el nivel donde haya llegado. En vez, el juego guarda las horas de tiempo jugadas, el % de hit rate y qué tan lejos hayas llegado en cada partida. Al jugar más horas, y sobretodo conseguir mejores puntuaciones de nivel, eventualmente eras premiado con más vidas al inicio del juego y más continues.
En esencia, Contra: Shattered Soldier te reta a que lo termines en una sentada y encima que lo hagas únicamente con los continues y vidas con que comienzas.
Por Qué No Podemos Ser Felices?
Shattered Soldier dividió definitivamente a los fans de la serie. Por un lado estaban los puristas que querían sus power-ups flotantes y colores salidos de una cómica de los 80s. Por el otro lado estaban los que reciben nuevas (y buenas) ideas con brazos abiertos y les gusta la mala vida.
Hay que ser un poco masoquista para tirarse al fuego con este Contra. A mis 40 años reconozco que me gusta cuando no me lo ponen fácil, pero ya no tengo la tenacidad para aguantar cuando me lo ponen tan difícil.
Con eso dicho, en el año 2006 yo rompía este fokin juego, man.
Según cuenta la película de apertura, Bill Rizer, el protagonista del Contra original en NES, es liberado de prisión tras ser juzgado por crímenes de guerra. Los poderes que gobiernan este mundo distópico deciden sacarlo de su condena para enviarlo a un infierno peor que cualquier cárcel, pero también uno en el que saben que solo él podría sobrevivir.
La vaina con los juegos difíciles es que son para gente que no tiene problema en dejar la satisfacción de último. Para aquellos que disfrutan del proceso de aprender y mejorar, este tipo de título es un reto, no un castigo. Mientras más difícil es, más nos fuerza a empujar con ganas.
Juegos difíciles como Contra: Shattered Soldier te vuelven humilde y te mantienen honesto con tus capacidades, para que sepas donde estás parado y puedas mejorar si le echas ganas. Necesitamos que existan más juegos así.
Reviviendo el mejor Contra de todos los tiempos
Hice un video mostrando cómo puedes crear tu propio HD remaster de Shattered Soldier usando el emulador PCSX2.
Ojo: en el video te muestro cómo configurar el emulador, pero por razones legales no puedo indicarte dónde conseguir una copia del juego. Esta parte te toca a ti.
La emulación es legal y ética siempre que tengas una copia original del juego que estás emulando pero, en el caso de juegos como este, ya no se consiguen copias baratas y la consola PS2 es aún más difícil de conseguir.
Peor aún, la empresa que publicó el juego, Konami, no parece interesada en hacer el título disponible en plataformas digitales.
Esto hace que la emulación sea la única forma de disfrutar este juegazo, así que en el video de abajo te indico como hacerlo para que lo goces con los mejores gráficos y resolución.
Un MÁXIMO RESPECT a NoBigDeal La por el paquete de texturas que hace esto posible.
Descarga la versión más reciente de PCSX2 Nightly Release (Importante: tiene que ser el nightly release para que funcionen los pasos a continuación).
Asumiendo que ya tienes tu copia digital de Contra: Shattered Soldier, sigue los pasos debajo en PCSX2.
Configuración base del juego:
- Haz clic derecho sobre el nombre del juego
- En la lista selecciona “Properties”
- Vete a “Emulation” y activa:
- Enable multithreaded VU1 (MTVU)
- Vertical Sync (VSync)
- Vete a “Patches” y marca la casilla de “Enabled” para Widescreen 16:9 (pantalla ancha)
- Vete a “Graphics” y selecciona:
- Renderer: Vulkan
- Adapter: selecciona tu tarjeta gráfica
- En la pestaña “Display” selecciona:
- Fullscreen Ratio: Borderless Fullscreen
- Aspect Ratio: Auto Standard
- FMV Aspect Ratio Override: Widescreen (16:9)
- Deinterlacing: Automatic
- Bilinear Filtering: Bilinear (Smooth)
- Marca la opción “Anti-Blur”
- En la pestaña “Rendering” selecciona:
- Internal Resolution: 8x Native
- Anisotropic Filtering: 8x
- Marca la opción “Midmapping”
- En la pestaña “Texture Replacement” marca las casillas:
- Load Textures
- Asynchronous Texture Loading
- (Opcional) en la pestaña “Post-Processing” selecciona:
- Shade Boost
- Ajusta el brillo, contraste y saturación dependiendo de la pantalla donde vayas a jugar
Cargar Texturas HD en el emulador:
- Descarga las texturas HD aquí
- Descomprime el archivo .zip que descargaste y pon las texturas en una carpeta de fácil acceso
- En PCSX2, vete a “Settings” > “Texture Replacement”
- En la sección “Search Directory”, haz clic en “Open” y busca la carpeta donde guardaste las texturas
Con esto tendrás Contra: Shattered Soldier andando en tu PC a 60 cuadros por segundo y resolución 4K.
Si necesitas más ayuda visual, chequea el siguiente video: